Las piñas, el fruto de la muerte.
Una de las representaciones más habituales en los capiteles, y la más antigua es la decoración vegetal. Aunque tienen un sentido decorativo, no hay que olvidar que muchos elementos que tiene pueden llevar además ese sentido iconográfico que tanto gustaba a la sociedad medieval.
En este contexto quiero hablar hoy de las piñas, un fruto que, prácticamente en todos las iglesias, encontraremos al menos una vez representado en uno de sus capiteles. Por ejemplo la imagen de hoy es del Panteón de los Reyes de San Isidoro de León.
Las piñas son un fruto perenne, y por tanto se vincula a la muerte y al ámbito funerario. A su vez todas esas escamas que forman la piña y que se entremezclan y superponen son una referencia a la superación, y a la superación de lo desconocido y ¿qué es lo desconocido? La muerte, por tanto este símbolo se coloca en lugares relacionados con ella, como ocurre en esta sala, el Panteón de los reyes, es decir, el lugar de su enterramiento, la zona desde la que ascenderán al cielo y harán frente a la muerte.
Quizás es un símbolo un poco complejo pero si lo analizamos detenidamente acaba teniendo sentido. ¿Qué pensáis vosotros?